Sé que siempre estás ahí, que siempre lo has estado y que lo vas a estar.
Siempre lo he sabido, pero notarlo tanto, "hacerlo" tan real... Me llena por dentro.
Gracias, de verdad.
Te siento cerca, ya lo sabes. Y que estés pendiente de mí me hace ver que te necesito, que te quiero a mi lado y que quiero contar contigo.
Que siempre estás ahí.
Además me sirve para acordarme, de vez en cuando, de preguntarte qué tal estás tú, por si te ocurriese a ti lo mismo conmigo.
Te quiero mucho, mucho, mucho.
Y, como te dije una vez, hace no mucho: Gracias por estar ahí, en la sombra, esperando a que me dé cuenta de que necesito un abrazo.
Me hace muy feliz saber que siempre estarás para mí.
Te quiero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario